✍🏽 Alejandro Almanza Aguilar 👨🏽💻
En tiempos donde la política parece más obsesionada con el futurismo electoral que con las responsabilidades del presente, el presidente municipal de Bahía de Banderas, Héctor Santana García, ha lanzado un mensaje firme, oportuno y necesario: “En el Gobierno de Bahía de Banderas no nos distraemos con encuestitis”.
Con estas palabras, el alcalde badebadense ha marcado una postura que, más allá de lo político, es profundamente ética. Santana ha observado —como muchos ciudadanos también lo perciben— que algunos servidores públicos ya se ven más preocupados por sus aspiraciones personales que por las funciones para las que fueron elegidos. Ante eso, ha sido claro: el pueblo votó para que trabajemos, no para que nos distraigamos con la mira en otro puesto.
Y razón no le falta. En menos de un año, su gobierno ha realizado más de 100 obras públicas y sociales, cifra que supera incluso la suma total de lo que han logrado en conjunto los otros 19 municipios de Nayarit en el mismo periodo. Estos resultados no son casualidad, son producto de una administración enfocada, disciplinada y con una vocación auténtica de servicio.
En este contexto, la declaración de Santana cobra un valor doble. Primero, como un llamado a la responsabilidad dentro de su propio equipo; y segundo, como un mensaje político poderoso: no se gobierna con aspiraciones, se gobierna con hechos. Las encuestas pueden subir o bajar, pero los resultados tangibles construyen confianza real en la ciudadanía.
Su frase final, “Ya llegarán los tiempos, y que los resultados hablen por cada uno”, no es un simple remate político: es una sentencia que separa a los que sirven de los que se sirven. Mientras algunos buscan reflector, Héctor Santana y su equipo siguen sumando calles, agua potable, infraestructura social, apoyos comunitarios y resultados.
En una era donde abundan los discursos pero escasean los resultados, vale la pena reconocer a quien pone el trabajo por encima de la especulación. Porque, como bien dijo el alcalde: no se ocupan encuestas cuando el trabajo demuestra con hechos lo que se ha hecho y se sigue haciendo.
Hoy por hoy, Bahía de Banderas tiene un presidente que gobierna con los pies en la tierra y la mirada en la gente, no en la siguiente elección. Y eso, en sí mismo, ya es una buena noticia.
