El oficial se encerró dentro de su vivienda tras ser desarmado por un agente de la policía municipal de Tepic, que estaba de civil, y logro quitarle el arma.

El militar corrió a su casa y se encerró con su pareja sentimental, a la cual habría presuntamente agredido a golpes y la mantiene probada de su libertad.

Agentes de seguridad pública estatal y municipal mantienen rodeada la finca en espera de que el soldado salga de la casa y se entregue a las autoridades.

Cabe destacar que horas antes otro elemento de la Guardia Nacional y tres acompañantes, realizaron detonaciones de arma de fuego al aire, mientras ingerían bebidas embriagantes.